La incomprensión de lo que nos dejamos imponer Primero una afirmación temeraria: “ la izquierda de todos los tiempos y en todos los países ha sufrido para entender y desarrollar el juego electoral” Semejantes generalizaciones parecieran decir algo cuando en realidad son expresión de una enorme indefinición que pretende ocultar una incomprensión aún mayor acerca de lo que, de ninguna manera, es un juego: la lucha de clases y su devenir histórico. No sabemos a qué izquierda de toda la geografía del mundo, y a qué tiempo histórico hace referencia el autor, sin embargo en lo único en que podemos acordar (sin afán de buscar falsas coincidencias) es que las izquierdas han sufrido sí, es cierto. Y mucho. Cuestionar el orden estatuido, denunciar sus trampas, rechazar leyes y propuestas maliciosas, desde la fangosidad de las trincheras de los desposeídos suele conllevar miseria, dolor, dudas, contradicciones y, en algún momento hasta resistir cañonazos, de acero o de dinero. Lo fantástic